lunes, 15 de septiembre de 2008

A la hija, tápale la rendija

Doble sentido evidente. Siendo buenos, recomienda que no demos a ver la tentación, a tapar las rendijas de la ventana para que no se vea. Siendo ligeramente pícaros, no hay que olvidar que la honra se va por las rendijas.

4 comentarios:

Gaeddal dijo...

Este va a ir directo a mi repertorio.

Por cierto, otra muestra de machismo en el refranero. Como aquello de "ata a la yegua, que los potros andan sueltos".

Résped dijo...

Gracias, este no lo conocía. Las mujeres, como depositarias de la honra es un tópico de la cultura popular que pasó a la literatura de los Siglos de Oro. Pero no hace falta ir tan lejos, hace 30 años las cosas estaban aquí muy malitas. Y hoy en día, la chica que tiene varias parejas (incluso consecutivas) es un "putón", mientras que el chico...

Anónimo dijo...

¿No es TÁPALA la rendija?

Résped dijo...

No, no es "tápala" eso sería un laísmo, al usar "la" para el objeto directo.

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