Este refrán es un consejo que sirve para los malos tragos, que debemos intentar no alargar en la medida de los posible. A veces, cuando un acontecimiento se nos presenta amargo, lo dilatamos y eso sabemos que no lo facilita sino que, muy al contrario, lo alarga innecesariamente y esta dilación hace que sea dos veces amargo. Por esto, cuando se presentan malos momentos, conviene pasarlos pronto, si está en nuestra mano.
2 comentarios:
También existe el dicho "al mal paso darle prisa".
Saludos.
Roberto.
Así es.
Publicar un comentario