Ya hemos comentado la importancia de acompañar las buenas palabras con los hechos, pues, si no, quedan en nada las promesas; en este sentido hemos visto refranes como ¡Cuánto te quiero perrito... o Dame dinero y no consejos. En esto mismo incide el refrán de hoy, uno de los más populares dentro de esta línea temática, señalando la importancia de los actos frente a la vacuidad de las palabras, puesto que no solo con buenas intenciones se puede pretender que estamos haciendo algo. Especialmente, se lo pueden aplicar los enamorados, puesto que no vale con hablar, sino que el amor se ha de demostrar y probar con los hechos.
Variantes:
- Obras son amores, que no buenas razones.
- Obras son amores.
- Obras son querencias (Santillana, ver bibliografía).
- Hechos son amores, y no buenas razones.
Otros idiomas:
- Valenciano: Obres són amors i no bones raons.
- Gallego: Obras son amores.
- Francés: On connaît les gens à leurs œuvres.
- Italiano: Fatti e non parole.
Como curiosidad recordar aquella paráfrasis futbolera que de este refrán se hizo para dar título a un programa de ¡Manolo Escobar! que dio en llamarse: Goles son amores. Y no digo más.
el amor no se dice, sólo se vive
ResponderEliminarEl amor se demuestra con acciones, palabras no tienen sentido si el amor no se demuestra.
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