Junio es el último mes de la primavera y en el que se inicia el verano y también es un mes importantísimo en el terreno agrícola, ya que se cosechan los cereales, por todo ello tiene gran importancia en el refranero.
Aunque las mieses ya están crecidas no está mal que al principio de este mes lleguen lluvias y se dice que Agua de junio temprana, grandes males subsana, recalcando que es de gran ayuda si no ha llovido durante el crecimiento del cereal (ver El agua por san Marcelino, buena para el pan, mejor para el vino).
Pero esas lluvias deben ser tempranas para ser positivas, ya que, en otro caso, se dice Agua de junio, infortunio o Aguas de junio, infortunio, ya que puede hacer pudrirse al cereal que esté listo para segar: En junio, la hoz en puño.
Pero así es junio, que lo mismo viene seco que se pasa de agua: Caprichoso junio, o sequía, o diluvio, aunque es mejor que venga seco: Junio brillante, año abundante.
Aunque las mieses ya están crecidas no está mal que al principio de este mes lleguen lluvias y se dice que Agua de junio temprana, grandes males subsana, recalcando que es de gran ayuda si no ha llovido durante el crecimiento del cereal (ver El agua por san Marcelino, buena para el pan, mejor para el vino).
Pero esas lluvias deben ser tempranas para ser positivas, ya que, en otro caso, se dice Agua de junio, infortunio o Aguas de junio, infortunio, ya que puede hacer pudrirse al cereal que esté listo para segar: En junio, la hoz en puño.
Pero así es junio, que lo mismo viene seco que se pasa de agua: Caprichoso junio, o sequía, o diluvio, aunque es mejor que venga seco: Junio brillante, año abundante.
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