Páginas

miércoles, 15 de febrero de 2012

Eppur si muove

Si bien este blog no suele ocuparse de citas, hoy, día del aniversario del nacimiento de Galileo Galilei, traigo una frase de este astrónomo, matemático, físico, filósofo, científico, genio al fin.

Galileo fue obligado a abjurar de su teoría heliocéntrica, puesto que se consideró contrario a la palabra de Dios que él dijera que la Tierra giraba alrededor del Sol y no, como se pensaba, al contrario. Así, un Galileo anciano, ya casi ciego, cedió y se presentó ante el Santo Oficio para negarse a sí mismo pero se dice que, acabada la vista, cuando se alejaba, dijo estas palabras, que podemos traducir como "Y, sin embargo, se mueve".

Estas palabras se usan para protestar ante una rectificación obligada, para indicar que seguimos pensando lo mismo. Es también una frase de afirmación del poder de la verdad y de la ciencia frente a la superstición y el dogmatisomo.

Contaré una anécdota que siempre me recuerda esta frase. Hace muchos años, en el instituto, un profesor nos "castigó" a un compañero y a mí por llevar pelo largo y camisetas de grupos de rock. El profesor, que supongo ya no estará en activo, de apellido Laguarda, bien lo recuerdo, y cuyo apodo no reproduciré, nos obligó a presentar un trabajo sobre por qué era mejor la música clásica. He de decir que, si bien me gusta este tipo de música, la cantidad de sandeces que aquellos pocos folios incluyeron fue descomunal. Nos guardamos la revancha para la frase final que venía a decir: "Por todo esto la música clásica es claramente superior a la música moderna que tanto mueve a la gente; sin embargo, se mueve". Don José Vicente no captó la ironía y nos aprobó.



No hay comentarios:

Publicar un comentario