Se dice cuando van mal las cosas, recordando que la situación no puede prolongarse de manera indefinida, igual que nos dice No hay mal que cien años dure. También se dice cuando alguien está muy enfadado, recordando que el enfado se tiene que pasar.
Variante: Siempre que llueve, escampa.
Variante: Siempre que llueve, escampa.
Versión gallega: Nunca choveu que non escampara.
ResponderEliminarUn abrazo, compa